La Alianza por una Agricultura Sostenible defiende el modelo de producción agrícola en España

La Alianza por una Agricultura Sostenible (ALAS) representa a miles de agricultores, ganaderos, cooperativistas, empresarios y exportadores del sector productor agroalimentario. Durante su presentación, ALAS ha defendido el modelo de producción agrario en España y ha resaltado la importancia de confiar en los criterios científicos como base para el desarrollo de la agricultura.

Fecha: 26-Oct-2018

Fuente: FACA

Miles de agricultores, ganaderos, cooperativistas, empresarios y exportadores del sector agrícola representados en las principales organizaciones profesionales agrarias de ámbito nacional se han unido en la Alianza por una Agricultura Sostenible (ALAS), con el objetivo de defender el modelo agrícola en España que promueve una producción agraria sostenible. Esta Alianza está integrada por Asaja; UPA; Cooperativas Agro-alimentarias de España; la Federación Española de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas vivas (FEPEX), y la Asociación Española Agricultura de Conservación Suelos Vivos (AEAC.SV). Los agricultores españoles tienen que producir alimentos para atender la demanda de una población en constante crecimiento. Al mismo tiempo, los cultivos se desarrollan en entornos donde proliferan plagas y enfermedades que ponen en riesgo la supervivencia de las plantas.

En este contexto, los agricultores españoles impulsan ALAS con el fin de asegurar el acceso a la tecnología desarrollada con base científica, para afrontar el reto de producir alimentos de calidad de una forma sostenible en el plano medioambiental, social y económico. Fruit Attraction, cita anual del sector que en 2018 celebra su 10º aniversario, ha acogido la presentación de la Alianza en un acto que ha contado con la participación de Ignacio Senovilla, secretario de Agricultura de UPA; Ricardo Serra, vicepresidente nacional de Asaja y Presidente de Asaja Andalucía; Luis Martín, responsable de Calidad de FEPEX; Rafael Espejo, de la Asociación Española de Agricultura de Conservación de Suelos Vivos, y José Antonio Rodríguez, presidente sectorial de Suministros en Cooperativas Agro-alimentarias de España. Todos ellos han compartido algunos datos de la actividad agraria en España que muestran su importancia para la economía y el empleo, dando a conocer el decálogo que fundamenta las bases de trabajo de ALAS. Solo durante el primer trimestre de 2018 el empleo agrario representó 833.800 puestos de trabajo (4,4 % del total) y en 2016 la renta agraria en España alcanzó los 25.688 millones de euros, ocupando el primer lugar en importancia dentro de las agriculturas de nuestro entorno.

Estas cifras dan una imagen clara de la importancia de un sector tan relevante para nuestra economía, y sorprende el desconocimiento generalizado que en nuestra sociedad existe acerca de él. Un buen ejemplo lo encontramos en la polémica generada por el herbicida glifosato en los últimos años, que, en palabras de Ignacio Senovilla, de UPA, “ha mostrado lo lejos que la ciudadanía se encuentra del origen de los alimentos, algo muy grave en un país como el nuestro”. Esta afirmación ha sido reforzada por Ricardo Serra, de Asaja, quien opina que “tenemos un grave problema de comunicación. Existe un tremendo desconocimiento sobre la realidad de la agricultura, y no debemos olvidar que la batalla comienza en los colegios”. José Antonio Rodríguez, de Cooperativas Agro-alimentarias, ha destacado que “la ciencia tiene que ser un factor determinante de nuestra actividad que debe ser trasladado a la sociedad”. La innovación, las últimas tecnologías en mejora de plantas, agricultura de precisión, digitalización y geoposicionamiento ayudan a optimizar el uso de los recursos, como el agua, la tierra de cultivo o la aplicación de insumos, como fertilizantes y fitosanitarios. El resultado es una agricultura más eficiente y sostenible.

En este sentido se ha pronunciado Rafael Espejo, de AEAC.SV, quien ha resaltado el importante papel que una adecuada gestión del suelo, y en especial evitar la erosión, juega en la lucha contra el cambio climático. En este sentido, son muchos los beneficios que puede ofrecer la agricultura de conservación. Las asociaciones integradas en ALAS resaltan la importancia de confiar en los criterios científicos y no basar las decisiones que les afectan en enfoques ideológicos. En palabras de Luis Martín, de FEPEX, “ninguna generación ha disfrutado de unos alimentos tan seguros como lo que tenemos hoy, y para ello nos hemos dotado de los controles más rigurosos y estrictos del mundo”. Esperanza Orellana, directora de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha clausurado el acto felicitando a ALAS por ser una iniciativa proactiva que informa para romper la brecha entre lo urbano y lo rural a través de mensajes positivos. Y porque “un consumidor formado debe ser escuchado, y el agricultor debe responder a sus demandas”, ha añadido Orellana.