"Esta nueva regulación es una muy buena noticia tanto para los agricultores orgánicos, como para los consumidores. La normativa existente hasta el momento estaba seriamente desactualizada, incluidas muchas de sus derogaciones que datan de los años noventa. Desde entonces, el sector orgánico ha crecido enormemente, liderando un exitoso cambio. Por tanto, esta nueva legislación permitirá apoyar el crecimiento continuo de la alimentación ecológica, al tiempo que simplificará las reglas.

Con la nueva norma nos aseguramos de que todas las importaciones orgánicas cumplan con los estándares la Unión. Esto pondrá a los agricultores europeos en igualdad de condiciones con sus competidores internacionales y permitirá que los consumidores tengan una mayor confianza en los productos orgánicos, ya que serán de la mejor calidad posible.

Pero el gran éxito de este acuerdo es que las semillas y el material reproductivo adecuado para la agricultura orgánica estará próximamente al alcance de los agricultores (los llamados materiales orgánicos heterogéneos y variedades orgánicas). Además, las variedades tradicionales, cuya venta estaba prohibida según las directivas europeas, podrán comercializarse permitiendo que la diversidad biológica regrese a los campos. Asimismo, las nuevas disposiciones permitirán a los agricultores orgánicos ahorrar y multiplicar semillas en sus granjas. Todos ellos logros de enorme importancia.

A la Comisión Europea se le ha encomendado la tarea de investigar cómo evitar que las granjas orgánicas se contaminen con pesticidas. Esperamos los resultados de su investigación, así como medidas contundentes de precaución para evitar cualquier contaminación y compensar a los agricultores orgánicos si así sucede”.