Los regantes piden a la Administración la normativa marco para impulsar la producción de renovables para autoconsumo

Fecha: 28-Jul-2017

El presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (FENACORE) y presidente de la Comunidad Euromediterránea de Regantes (EIC), Andrés del Campo, pidió hoy a la Administración que articule la normativa marco para impulsar la producción de energía distribuida para autoconsumo en las zonas regables, con el fin de hacer efectiva una reducción de las tarifas.

Del Campo –que intervino en una jornada técnica demostrativa celebrada en Valladolid sobre el proyecto europeo de energía fotovoltaica Maslowaten impulsado por la EIC entre otras entidades- recordó que desde que se suprimieran las tarifas especiales en 2008, el término de potencia se ha incrementado en más de un 1.000%, provocando que el aumento medio de la factura haya sido superior al 100%, haciendo inviables buena parte de los sistemas de riego modernizados, que ahorran agua, pero demandan más energía.

Los resultados obtenidos a través de este proyecto, que comenzó el año pasado y está financiado por la Unión Europea con cinco millones de euros, ponen de manifiesto que el uso de energía fotovoltaica en los bombeos y distribución del agua de riego permiten un ahorro de hasta el 60% en la factura eléctrica.

Así, Maslowaten, que ha permitido levantar un total de cinco estaciones de energía solar repartidas en zonas regables de España (Alicante y Valladolid), Italia, Portugal y Marruecos, demuestra que el autoconsumo es una medida eficaz para compensar el sobrecoste de más de 300 millones de euros extras que los regantes españoles vienen pagando a las eléctricas con motivo del déficit de tarifa.

Al demostrar a gran escala la rentabilidad de la energía fotovoltaica, Maslowaten está sirviendo además de referencia a los regantes del arco mediterráneo, que comparten con los españoles la necesidad de reducir los costes derivados del alto consumo energético de los sistemas modernizados.

Concretamente, en una comparativa entre los países de la región mediterránea donde los cultivos agrícolas tienen un peso significativo en su economía, España es donde mayor presión ejercen los costes energéticos, al tener casi las tres cuartas partes de su extensión regable dotada con sistemas de riego modernizado, siendo más del 50% sistemas por goteo, considerado el más eficiente.

Por esta razón, aunque se consiguió una fiscalidad eléctrica más ventajosa y una reducción de módulos, que supone un ahorro anual de más de 54 millones de euros para el conjunto del regadío español, se necesitan soluciones complementarias que compensen la totalidad del sobrecoste soportado por el sector, basado principalmente en los costes fijos regulados.

De ahí que esta iniciativa europea para impulsar la energía fotovoltaica, se sume a otras medidas creativas impulsadas por Fenacore como la central de compras, que garantiza unas tarifas competitivas al asegurar como precio máximo del suministro el que marque el pool diario.

Según Andrés del Campo, “todas estas medidas son sólo soluciones parciales para reducir los costes ya que lo realmente importante es pagar por la potencia realmente utilizada y no por la potencia máxima contratada durante los doce meses del año, aunque las estaciones de bombeo no estén en funcionamiento. También es crucial seguir potenciando la aplicación de las nuevas tecnologías en la modernización de nuestros regadíos para obtener la mayor eficiencia en el uso del agua y la energía, de modo que podamos producir más con menos agua”.