Este Plan ofrece medidas para cambiar el primer eslabón de la cadena de la sostenibilidad, es decir, el diseño de los productos. Dichas medidas están encaminadas hacia la innovación y la digitalización para garantizar que no se desperdicia nada.

Medidas del Plan

1. Productos sostenibles, esto es que los productos comercializados en la UE van a cumplir legislativamente 3 requisitos: mayor duración, capacidad de reutilización, reparación y reciclaje, e incorporación de material reciclado en lugar de materias primas primarias.
   Al respecto, la UE restringirá los productos de un solo uso, haciendo frente a la obsolescencia prematura y se prohibirá la destrucción de bienes duraderos que no hayan sido vendidos.
2. Empoderar a los consumidores, que van a recibir información sobre la reparación y la duración de los productos que les ayudará a tomar decisiones más sostenibles.
3. Centrarse en los sectores que utilizan más recursos y que tienen un elevado potencial de circularidad.
4. Garantizar que se produzcan menos residuos: transformarlos en recursos secundarios de alta calidad que se integren en un mercado de materias primas secundarias; recogida separada de residuos y su etiquetado; reducir al mínimo las exportaciones de residuos de la UE y hacer frente a los traslados ilícitos.

Con estas medidas, la circularidad comenzará a ser la norma en las vidas de los ciudadanos europeos y acelerará la transición sostenible de la economía.