Urcacyl solicita modificar los objetivos del agroHorizonte 2020 en vacuno de leche

Desde Urcacyl se demanda a las administraciones una mayor protección a las cooperativas, que están siendo objeto de grandes presiones en esta profunda crisis láctea.

El actual escenario lácteo padece posiblemente la mayor crisis sufrida por este sector en el país durante los últimos 30 años. Aunque el ámbito es internacional en España la situación es más injusta al tratarse de un Estado netamente deficitario en leche y productos lácteos.

Como ya advertimos desde Urcacyl hace medio año se trata de un problema basado en la regulación de volúmenes, donde, como desgraciadamente pronosticábamos, las cantidades de leche se han convertido en otro elemento de presión, además del precio.

Siendo los volúmenes de leche una de las claves de esta crisis, es absolutamente necesario enviar al sector mensajes claros, concisos y no contradictorios. Así por ejemplo la Interprofesional Láctea (INLAC), donde esta representadas las Organizaciones Profesionales Agrarias, las industrias lácteas y las cooperativas, lanzó un mensaje de “contención de la producción”, después de su encuentro con la Ministra de Agricultura el pasado 7 de julio.

En estas circunstancias Castilla y León debería replantearse el principal objetivo del vacuno de leche en el AgroHorizonte 2020 que pretendía duplicar, hasta 2020, la producción actual de leche regional pasando de 820.000 toneladas a 1.600.000 toneladas, lo que supone un crecimiento del 95 por ciento en cinco años. Desde Urcacyl se cree que es necesario volver a convocar a los diferentes agentes del sector, bien bajo el AgroHorizonte 2020 o en la denominada Mesa del Vacuno de Leche de Castilla y León.

Establecer tasas de crecimiento es muy complicado en un mercado globalizado y donde el máximo productor mundial, que es Europa, ha abolido el sistema de referenciación o cuotas. Deberíamos centrarnos en una serie de medidas que alivien la situación a corto plazo y que planifiquen actuaciones a largo, ya que nos encontramos ante un problema estructural más que coyuntural, por eso son necesarias políticas de mayor calado y no parches momentáneos.

Por otro lado, si gran parte de la solución está en la organización del sector a través de Organizaciones de Productores o de grandes cooperativas al estilo europeo, como de forma reiterada nos dicen las Administraciones, es necesario que las mismas busquen los cauces para potenciar la integración y sobre todo para evitar que las cooperativas y por ende sus socios, sean objeto del mayor número de presiones, tanto en la recogida como en los precios.