En primer lugar, las DO, IGP, etc., probablemente queden a nivel europeo, como un nicho de mercado, probablemente, por su propio volumen de producción. En cuanto a la posibilidad de acceso al mercado americano de estas producciones, por la misma razón anterior, es mucho más dudoso.
Por otro lado, la experiencia nos dice que el acceso al mercado americano es en realidad extremadamente difícil y más si se tiene en cuenta los medios económicos y humanos de los que se disponen para abrir y mantener esos mercados en los propios sectores.
Por último y no menos importante, a fecha de hoy, sorprendentemente la carne española de vacuno sigue vetada en el mercado americano.