Las medidas nacionales que exigen el etiquetado obligatorio de origen y procedencia de los productos alimenticios están permitidas por la legislación de la UE, pero deben estar justificadas, según ha dictaminado el tribunal más alto de Europa.
Las medidas nacionales que exigen el etiquetado obligatorio de origen y procedencia de los productos alimenticios están permitidas por la legislación de la UE, pero deben estar justificadas, según ha dictaminado el tribunal más alto de Europa.