Francia, que fue líder del grupo de países que votaron a favor de la prohibición de los neonicotinoides en abril de 2018, ahora da marcha atrás ante la ausencia de herramientas fitosanitarias u otras alternativas de sanidad vegetal para los agricultores contra plagas en remolacha.
Una herramienta ayudará a decidir la fecha de caducidad y la de consumo preferente de los alimentos a partir de criterios científicos