Esta semana se han sembrado decenas de especies de hierbas y flores aromáticas que favorecerán la biodiversidad una vez han sido eliminados de los terrenos restos de escombros y basuras
Las partes interesadas de diferentes sectores (asociaciones de apicultura y agricultura, agencias europeas, científicos y académicos, la industria de protección de cultivos, asociaciones veterinarias, ONG y otros) han colaborado estrechamente para desarrollar la plataforma prototipo, liderados por BEELIFE, con subvención de la EFSA.
El proyecto Márgenes para la Biodiversidad, tiene como objetivo testar, con la ayuda de biólogos, entomólogos, ingenieros agrónomos y agricultores, las buenas prácticas que se pueden llevar a cabo en el campo para mejorar las poblaciones de insectos polinizadores y de aves.
La Asociación Española de Entomología, junto a Ecologistas en Acción, ha lanzado una campaña bajo el nombre de “Sin insectos no hay vida”, para reclamar más investigación en este campo y demandar más protección para este grupo de especies, que aportan a la producción agrícola mundial entre 235.000 y 575.000 millones de dólares.
Esta semana se han sembrado decenas de especies de hierbas y flores aromáticas que favorecerán la biodiversidad una vez han sido eliminados de los terrenos restos de escombros y basuras