Este elevado porcentaje de éxito se debe al comportamiento único de estos nematodos beneficiosos, que penetran dentro de las orugas a través de cualquiera de sus orificios para después colonizarlas e infectarlas con una bacteria mortal que las mata en solo unas horas.
Este elevado porcentaje de éxito se debe al comportamiento único de estos nematodos beneficiosos, que penetran dentro de las orugas a través de cualquiera de sus orificios para después colonizarlas e infectarlas con una bacteria mortal que las mata en solo unas horas.