Los operadores de empresas alimentarias tendrán ahora dos años para adaptarse a esos nuevos topes que van a proteger contra bacterias patógenas (como la listeria o la salmonella).
Un informe elaborado por la industria cárnica del Reino Unido cuestiona la efectividad antibacteriana de estos aditivos y reaviva la inquietud entre los consumidores
La EFSA, y concretamente los expertos de la Comisión Técnica de Aditivos Alimentarios y Fuentes de Nutrientes Añadidos a los Alimentos, confirma la seguridad de los nitritos y nitratos que se añaden a los alimentos, certificando los niveles de seguridad que se establecieron en el año 2009 sobre el uso del E249 (Nitrito de Potasio) y el E250 (Nitrito de Sodio).
Los operadores de empresas alimentarias tendrán ahora dos años para adaptarse a esos nuevos topes que van a proteger contra bacterias patógenas (como la listeria o la salmonella).