De los múltiples parámetros que pueden ser evaluados para definir la calidad de la carne es de destacar el color, por su influencia en las preferencias de los consumidores por uno u otro tipo de carne, al ser apreciado de forma directa en los puntos de venta. Ha sido puesto de manifiesto por distintos autores, (Renerre, 1990; Mandel et al, 1998, Albertí, Sañudo, 1998) la influencia que sobre la intensidad de color de la carne de vacuno puede tener el genotipo, el ejercicio físico, la alimentación, la edad de los animales, los tratamientos post-mortem de la carne etc. Cuando se pretende producir carne a partir de terneros pasteros, el color de ésta puede ser una característica importante por la influencia de la actividad física de los animales y la ingestión de forrajes verdes. Sin embargo, el periodo de acabado, previo al sacrificio podría determinar variaciones en la intensidad del color de la carne producida.

Por todo ello, el objetivo de este trabajo ha sido el estudio de los parámetros definitorios del color de la carne (L*, a* y b*) y la concentración de pigmentos hemínicos en músculo, de terneros pasteros sometidos a distintas estrategias de alimentación durante el periodo de acabado.