Dosis medias de mantenimiento con quelato Fe-EDDHA (30 g/olivo en olivar intensivo y 50 g/olivo en el tradicional) pueden resultar suficientes para mejorar la producción en relación a los olivos no tratados y mantener un buen estado productivo.

Se recomienda el fraccionamiento de la dosis de mantenimiento anterior, aplicando un 75% en primavera y el 25% restante a principios de otoño. Estrategia de utilizar un tratamiento de choque el primer año en plantaciones muy afectadas por la clorosis férrica, y tratamiento de mantenimiento en los sucesivos años.

Los excelentes resultados alcanzados con la aplicación de quelatos de hierro ponen de manifiesto que, la aplicación al suelo a las dosis propuestas (por fertirrigación en sistemas de regadío, o mediante inyección a presión al suelo en secano), ha resultado ser una práctica muy eficiente.

El quelato Fe-EDDHA (o-o) ha demostrado su estabilidad en suelos calizos con pH elevados (rodean la molécula de Fe perfectamente y lo aíslan del medio gracias a su formulación y a los enlaces orto-orto), lo que unido a su coste, hace que se recomiende su uso.