La inestabilidad meteorológica, la variabilidad de los actuales fenómenos atmosféricos y la creciente virulencia con la que estos se producen son condiciones climatológicas cada vez más frecuentes. El pedrisco, aunque se trata de un riesgo característico de nuestra climatología, se ha convertido en los últimos años en uno de los fenómenos más destacados, llegando a provocar pérdidas y daños cuantiosos para la agricultura en España.
La inestabilidad meteorológica, la variabilidad de los actuales fenómenos atmosféricos y la creciente virulencia con la que estos se producen son condiciones climatológicas cada vez más frecuentes. El pedrisco, aunque se trata de un riesgo característico de nuestra climatología, se ha convertido en los últimos años en uno de los fenómenos más destacados, llegando a provocar pérdidas y daños cuantiosos para la agricultura en España.