Tecnologías como la robótica, la teledetección, el GPS, el láser o los sensores, siguen perfeccionándose y tienen aún un gran potencial por desarrollar en el sector agrario, que en buena parte va estrechamente ligado al Big data, con el fin de lograr una agricultura de precisión. Con estas palabras inauguraba ayer la directora general de Desarrollo Rural y Política Forestal del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Esperanza Orellana, la jornada sobre el papel de las nuevas tecnologías organizada por el Mapama.
Así lo ha avanzado el panel de expertos durante la primera mesa de debate “Agridata y la agricultura del futuro: la nueva revolución verde”, que ha servido para contextualizar el objetivo del AGRIDATA SUMMIT que hoy se está celebrando en Madrid.
Los augurios son bastante aterradores: los servicios de estadística de la FAO calculan que en 2050 la población mundial habrá aumentado a 9.000 millones de personas (ahora son 7.100 millones).
Tecnologías como la robótica, la teledetección, el GPS, el láser o los sensores, siguen perfeccionándose y tienen aún un gran potencial por desarrollar en el sector agrario, que en buena parte va estrechamente ligado al Big data, con el fin de lograr una agricultura de precisión. Con estas palabras inauguraba ayer la directora general de Desarrollo Rural y Política Forestal del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Esperanza Orellana, la jornada sobre el papel de las nuevas tecnologías organizada por el Mapama.