Se trata de una de las iniciativas de mayor calado del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para esta legislatura. La norma busca aumentar la eficacia y competitividad del sector agroalimentario español. Se basa en un modelo mixto de regulación y autorregulación de las relaciones comerciales
En el proceso de elaboración, el texto ha recibido cientos de alegaciones y se ha mantenido una interlocución fluida con todos los sectores afectados, incluidas las organizaciones de consumidores
El Gobierno dice que los agentes ya se están ajustando a la normativa, logrando mayor transparencia