Es sin duda el tema del momento. El coste de la energía y del suministro eléctrico en el sector agroalimentario sigue creciendo continuamente. La liberalización del mercado eléctrico en 2008 ya supuso un incremento de costes muy importante, sobre todo para los regantes, cuyo coste eléctrico se incrementó un 60% en un año. La última reforma eléctrica propuesta por el gobierno parece ser la puntilla. La industria de alimentación y bebidas ha mostrado recientemente su rechazo a la reforma energética. Los ganaderos han convocado movilizaciones por las consecuencias de dicha reforma sobre las plantas de tratamiento de purines. Los regantes también. El resto de operadores no tardará en salir a la palestra con este tema.
Es sin duda el tema del momento. El coste de la energía y del suministro eléctrico en el sector agroalimentario sigue creciendo continuamente. La liberalización del mercado eléctrico en 2008 ya supuso un incremento de costes muy importante, sobre todo para los regantes, cuyo coste eléctrico se incrementó un 60% en un año. La última reforma eléctrica propuesta por el gobierno parece ser la puntilla. La industria de alimentación y bebidas ha mostrado recientemente su rechazo a la reforma energética. Los ganaderos han convocado movilizaciones por las consecuencias de dicha reforma sobre las plantas de tratamiento de purines. Los regantes también. El resto de operadores no tardará en salir a la palestra con este tema.