Un nuevo estudio revela que los microplásticos no solo perjudican a las lombrices, sino que también disminuyen la calidad de los abonos que producen. Buscamos potenciar la capacidad de las lombrices para digerir microplásticos, convirtiendo el vermicompostaje en un proceso de limpieza, sin afectar la calidad del abono y, por ende, de los cultivos.
Los pellets de plástico son una de las principales fuentes de contaminación no intencional de microplásticos, por lo que la CE pretende que los operadores implementen mejores prácticas en su gestión.
Un equipo de investigación de la Universidad de Almería y la Universidad Miguel Hernández en Elche (Alicante) ha demostrado que los microplásticos reducen la eficacia de los biofertilizantes generados por las lombrices de tierra.
En los últimos tiempos el aumento de residuos plásticos se ha reafirmado como uno de los principales problemas medioambientales. Este material, presente en envases y objetos de uso diario juega un papel decisivo en zonas de agricultura intensiva. En la Región de Murcia, conocida como la ‘huerta de Europa’, el acolchado (cubierta de plástico sobre líneos de cultivo) aumenta la producción en campos de hortalizas, pero implica el uso de altas cantidades de plástico. Este plástico de baja densidad es difícil de retirar completamente de los campos y, con el tiempo, se descompone en partículas más pequeñas que son absorbidas por el suelo, transportadas por el agua o el viento y también ingeridas por otros animales vertebrados e invertebrados.
Juan Pedro Ferrio, investigador ARAID de la Unidad de Recursos Forestales, colabora en esta investigación de la Universidad de Concepción (Chile) publicada por la prestigiosa revista Science of Total Environment
Los ríos constituyen la principal fuente de contaminación de los mares por microplàstics. Una parte relevante de estos contaminantes se acumulan en las zonas de las playas y en los sedimentos de las desembocaduras. Así se desprende de una investigación desarrollada por el Institut de Ciència i Tecnologia Ambientals de la Universitat Autònoma de Barcelona (ICTA-UAB) que analiza la concentración de microplàstics en el delta del Ebro con el objetivo de cuantificar y entender la distribución de estos contaminantes en los sistemas acuáticos.
Un nuevo estudio revela que los microplásticos no solo perjudican a las lombrices, sino que también disminuyen la calidad de los abonos que producen. Buscamos potenciar la capacidad de las lombrices para digerir microplásticos, convirtiendo el vermicompostaje en un proceso de limpieza, sin afectar la calidad del abono y, por ende, de los cultivos.