Estamos asistiendo a una nueva revolución verde, esta vez sin químicos, sin herbicidas, sin tóxicos y sin transgénicos, es la revolución verde orgánica.
Durante la llamada revolución verde de los años 60, un movimiento que cambió las prácticas agrarias en muchas explotaciones de todo el mundo, se aplicaron técnicas de mejora genética para obtener variedades de cereales de talla reducida, más resistentes y productivos.
Los supercultivos de la moderna agricultura serán sin duda de gran ayuda, pero no podemos confiar únicamente en la biotecnología.