La menor producción de patatas en toda la zona NEPG, que engloba a Francia, Alemania, Bélgica y Países Bajos así como el escaso efecto de la inflación han propiciado hasta ahora unos precios de compra libre razonablemente buenos para los productores.
La menor producción de patatas en toda la zona NEPG, que engloba a Francia, Alemania, Bélgica y Países Bajos así como el escaso efecto de la inflación han propiciado hasta ahora unos precios de compra libre razonablemente buenos para los productores.