El autor, Xabier Iraola, hace un teórico ejercicio de empatía electoral ante las próximas elecciones municipales y forales poniéndose en el pellejo de aquellos profesionales del sector que ilusionados por los mensajes novedosos de algunos, tras cuatro años han comprobado que amargo es el sabor de la decepción.
El autor, Xabier Iraola, hace un teórico ejercicio de empatía electoral ante las próximas elecciones municipales y forales poniéndose en el pellejo de aquellos profesionales del sector que ilusionados por los mensajes novedosos de algunos, tras cuatro años han comprobado que amargo es el sabor de la decepción.