El clima seco, la ola de calor y la sequía que se extiende desde el Reino Unido hasta Rusia han frenado el desarrollo de los cultivos, lo que ha llevado a los analistas a recortar sus pronósticos para las cosechas europeas de este año. En Alemania, la sequía extrema en los últimos meses ha perjudicado los cultivos de trigo y cebada, lo que ha provocado la escasez de alimentos para animales y ha empujado a algunos agricultores a la bancarrota.
Nature Climate Change publica hoy un artículo de un conjunto de investigadores, entre los que se cuentan Elías Fereres y Margarita García-Vila, de la Universidad de Córdoba y el Instituto de Agricultura Sostenible del CSIC, según el que la producción del cereal se reduciría un 6% por cada grado que aumente la temperatura
El clima seco, la ola de calor y la sequía que se extiende desde el Reino Unido hasta Rusia han frenado el desarrollo de los cultivos, lo que ha llevado a los analistas a recortar sus pronósticos para las cosechas europeas de este año. En Alemania, la sequía extrema en los últimos meses ha perjudicado los cultivos de trigo y cebada, lo que ha provocado la escasez de alimentos para animales y ha empujado a algunos agricultores a la bancarrota.