Cuando las setas se hierven o fríen se reduce su valor nutritivo y capacidad antioxidante, pero si se cocinan a la plancha o al microondas apenas pierden nutrientes y mejora su actividad antioxidante. Así lo revelan los análisis de las cuatro especies de hongos más consumidas en el mundo tras someterlas a diferentes tratamientos culinarios.
Conseguir cultivar en extensivo setas de cardo y que tengan las mismas características que las silvestres ya no es una utopía. Durante años se ha buscado la fórmula para lograr grandes producciones de esta seta, tan apreciada gastronómicamente y tan rentable para sus productores.