El descenso en el consumo de patata registrado en los últimos años en España y de la superficie cultivada, con una pérdida de 134.000 hectáreas desde la década de los 90, hace que el sector considere necesarias medidas urgentes para invertir una tendencia que hace peligrar su futuro.
El descenso en el consumo de patata registrado en los últimos años en España y de la superficie cultivada, con una pérdida de 134.000 hectáreas desde la década de los 90, hace que el sector considere necesarias medidas urgentes para invertir una tendencia que hace peligrar su futuro.