Científicos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria – INTA de Argentina, la entidad pública encargada de realizar y centralizar la investigación agropecuaria en el país, está próxima a liberar la primera patata editada genéticamente de Latinoamérica.
Como cada año desde su fundación en 2006, este ejercicio han seguido aumentando los miembros de la Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (ANOVE), en la que actualmente se integran 55 empresas y centros de investigación. Así se ha señalado durante su Asamblea General, en la que ha tenido un papel protagonista el valor de la innovación genética y la necesidad de hacer hiapié en que los consumidores conozcan por qué la obtención vegetal tiene mucho que ver con su alimentación.
Este congreso contempla diferentes áreas temáticas como recursos fitogenéticos, biotecnología, cultivos leñosos, cultivos hortícolas, cultivos extensivos y otros cultivos de interés, a través de sesiones científicas orales y pósteres. Los organizadores pretenden que "el Congreso sea un foro de participación donde investigadores, docentes, técnicos, empresas biotecnológicas y de mejora genética vegetal, productores, etc., debatan, divulguen y analicen los avances y las tendencias de los distintos campos que integran la Mejora Genética Vegetal".
Científicos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria – INTA de Argentina, la entidad pública encargada de realizar y centralizar la investigación agropecuaria en el país, está próxima a liberar la primera patata editada genéticamente de Latinoamérica.