España puede a veces ser un país de contradicciones. Mientras compramos patata de conservación que se mantiene artificialmente durante hasta 9 meses a baja temperatura a Francia, el extranjero nos reclama nuestra patata nueva de temporada, un producto muy valorado por el mercado internacional por sus bondades gastronómicas y nutricionales.
España puede a veces ser un país de contradicciones. Mientras compramos patata de conservación que se mantiene artificialmente durante hasta 9 meses a baja temperatura a Francia, el extranjero nos reclama nuestra patata nueva de temporada, un producto muy valorado por el mercado internacional por sus bondades gastronómicas y nutricionales.