En una reciente comparecencia mía en el Comité Económico, Social y Medioambiental francés, varios consejeros subrayaron que nuestro sistema de seguros agrarios es una de las claves de la competitividad y la resiliencia de la agricultura española. Les respondí que sí, que es verdad, pero que es la respuesta que hemos sabido darnos para mantener una agricultura activa sobre el conjunto del territorio, cuando tenemos rendimientos cerealistas por ejemplo 4 o 5 veces inferiores a los suyos.
Tuve la impresión que, detrás de estos comentarios, había una cierta dosis de envidia ante la consolidación del modelo español. Mientras en España, no faltan los que parecen dispuestos a tirar el niño con el agua del baño.
En una reciente comparecencia mía en el Comité Económico, Social y Medioambiental francés, varios consejeros subrayaron que nuestro sistema de seguros agrarios es una de las claves de la competitividad y la resiliencia de la agricultura española. Les respondí que sí, que es verdad, pero que es la respuesta que hemos sabido darnos para mantener una agricultura activa sobre el conjunto del territorio, cuando tenemos rendimientos cerealistas por ejemplo 4 o 5 veces inferiores a los suyos. Tuve la impresión que, detrás de estos comentarios, había una cierta dosis de envidia ante la consolidación del modelo español. Mientras en España, no faltan los que parecen dispuestos a tirar el niño con el agua del baño.