El Centro de Innovación en Bioeconomía Rural de Teruel (CIBR), gestionado por el CITA, alberga este banco que cuenta con 40 variedades disponibles para los agricultores turolenses que lo deseen
El depósito en el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) de estas semillas autóctonas recopiladas por Intia en el marco del proyecto LIFE NAdapta asegura su conservación a largo plazo, evitando que se pierdan definitivamente.
El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) ha puesto en funcionamiento un Banco de Semillas en el Centro de Innovación en Bioeconomía Rural (CIBR) de Teruel, gestionado por el CITA. Su puesta en marcha se ha realizado en el marco del proyecto HortalizaTE, financiado con el Fondo de Inversiones de Teruel (FITE) del Gobierno de Aragón y coordinado por Cristina Mallor, investigadora de la Unidad de Hortofruticultura y responsable del Banco de Germoplasma Hortícola del CITA.
Conservar especies de plantas a largo plazo es posible gracias a la labor de los bancos de semillas. En sus instalaciones las semillas son desecadas en habitaciones con baja humedad relativa (15%) para más tarde ser conservadas a baja temperatura (-20°C en conservación tradicional hasta -180°C en criopreservación).
En un artículo publicado en Nature Plants , los investigadores de Royal Botanic Gardens, Kew, detallan por primera vez la escala de especies amenazadas que no se pueden conservar en los bancos de semillas.
Muy lejos de los huertos de banana de América Latina, Uganda e incluso de las plantaciones en Islas Canarias, un campus universitario belga cuenta con un laboratorio subterráneo que podría ser el salvavidas para una industria que se encuentra bajo amenaza.
El Banco del Milenio Kew ha sido galardonado recientemente con el Premio a la Conservación de la Biodiversidad de la Fundación BBVA (FBBVA).