El clima Mediterráneo ha sido distinguido por la geobotánica clásica entre fitoclimas de mayor repercusión en el paisaje de la Tierra, dadas sus especiales características y la complejidad de su flora. La existencia de una correlación negativa entre temperatura y precipitación, provocando un característico periodo seco estival, es la seña de identidad por excelencia de esta variante climática.
Con presencia de especies de Quercus L. de diferentes orígenes, aunque con tendencia a la convergencia morfológica y funcional, el clima Mediterráneo no es sólo propio de los robles perennifolios de hoja dura (esclerófilos), a pesar de la imagen trasmitida desde síntesis fitoclimáticas de gran implantación académica. La existencia de abundantes especies de robles caducifolios de invierno en áreas de influencia mediterránea, afectadas por una notable aridez, tanto en el suroeste de Norteamérica como en las partes más orientales de la cuenca del mar Mediterráneo, sugiere que los periodos más fríos del año pueden no ser adecuados para mantener hojas útiles para aportar carbono al vegetal.
Este paradigma, ya expresado por Mitrakos en los años 80 del siglo anterior, establece que el frío invernal se suma a los momentos inadecuados para el crecimiento de la planta mediterránea. Usando la encina – ejemplo de perennifolio de larga longevidad foliar - como caso de estudio, se plantean en este seminario los ritmos estacionales – con incidencia en la tolerancia a la aridez y a las baja temperaturas - de un vegetal “tipo” de la flora mediterránea. Los aspectos que, a pesar de la abundancia de estudios sobre Q. ilex, aún requieren de una mayor documentación son discutidos.
El proyecto LIFE Agromitiga presentará en el Parlamento Europeo la evolución de los trabajos realizados y abordará, en este foro privilegiado, las oportunidades que plantea la agricultura del carbono para el sector agropecuario, así como las oportunidades que surgen en el panorama agrario europeo para rentabilizar este tipo de producción.
La Comisión Europea ha presentado una propuesta de Reglamento para establecer un primer marco voluntario para certificar de forma fiable la captura y almacenamiento de carbono (CO₂) de alta calidad en la UE
Las interacciones entre los nutrientes del suelo cambian de forma importante ante un aumento del CO2 atmosférico, algo que se ha podido constatar a través de un trabajo que han llevado a cabo durante tres años investigadores de la Universidad de Cádiz, en colaboración con expertos de la Western Sydney University y que ha sido publicado en la revista Journal of Ecology.
Científicos han demostrado que es posible criar variedades de ganado con emisiones reducidas de metano, un poderoso gas de efecto invernadero que tiene en la ganadería una de sus fuentes principales.
Los camiones que circulen por las carreteras europeas serán más limpios a partir de 2025. El Consejo ha adoptado hoy por primera vez unas normas europeas sobre emisiones de CO2 para camiones y otros vehículos pesados. De acuerdo con la nueva normativa, los fabricantes deberán reducir las emisiones de dióxido de carbono de los nuevos camiones un promedio del 15 % a partir de 2025 y del 30 % a partir de 2030, en comparación con los niveles de 2019.
Las instalaciones industriales y plantas de generación de electricidad han emitido 127,3 millones de toneladas de CO2 equivalente en el año 2018, es decir, un 6,3% menos que en 2017
En el sector de la generación eléctrica la reducción de emisiones ha alcanzado el 15%, gracias a la elevada hidraulicidad de 2018. Sin embargo, en los sectores industriales crecen un 2% y en el de la aviación un 9%
Las emisiones de gases de efecto invernadero cubiertas por este régimen en España suponen alrededor del 40% del total nacional
El 27 de febrero de 2019 celebramos nuestra reunión de seguimiento, que ha servido para revisar y valorar todas las actividades realizadas durante la última anualidad, así como para proponer nuevas actividades para el próximo periodo.
La Autoridad de Seguridad Alimentaria de Irlanda (FSAI) alerta de la actual escasez de dióxido de carbono en toda Europa, con el consiguiente impacto que puede tener en la industria alimentaria.
La Coordinadora
de Organizaciones de
Agricultores y Ganaderos
lniciativa Rural de Murcia
(COAG-IR Murcia) será la
encargada de realizar una
experiencia piloto de mejora
del secuestro de carbono
para los cultivos de olivo y
con el n
de mitigar el cambio
climático y contribuir a la
mejora de la calidad del aire. Será gracias los más de 95.000 euros que
aportará la Consejería de Empleo, Universidades, Empresa y Medio
Ambiente, tal y como aprobaba ayer, 6 de junio, el Consejo de Gobierno
de Murcia.
Resumen:
El clima Mediterráneo ha sido distinguido por la geobotánica clásica entre fitoclimas de mayor repercusión en el paisaje de la Tierra, dadas sus especiales características y la complejidad de su flora. La existencia de una correlación negativa entre temperatura y precipitación, provocando un característico periodo seco estival, es la seña de identidad por excelencia de esta variante climática.
Con presencia de especies de Quercus L. de diferentes orígenes, aunque con tendencia a la convergencia morfológica y funcional, el clima Mediterráneo no es sólo propio de los robles perennifolios de hoja dura (esclerófilos), a pesar de la imagen trasmitida desde síntesis fitoclimáticas de gran implantación académica. La existencia de abundantes especies de robles caducifolios de invierno en áreas de influencia mediterránea, afectadas por una notable aridez, tanto en el suroeste de Norteamérica como en las partes más orientales de la cuenca del mar Mediterráneo, sugiere que los periodos más fríos del año pueden no ser adecuados para mantener hojas útiles para aportar carbono al vegetal.
Este paradigma, ya expresado por Mitrakos en los años 80 del siglo anterior, establece que el frío invernal se suma a los momentos inadecuados para el crecimiento de la planta mediterránea. Usando la encina – ejemplo de perennifolio de larga longevidad foliar - como caso de estudio, se plantean en este seminario los ritmos estacionales – con incidencia en la tolerancia a la aridez y a las baja temperaturas - de un vegetal “tipo” de la flora mediterránea. Los aspectos que, a pesar de la abundancia de estudios sobre Q. ilex, aún requieren de una mayor documentación son discutidos.