Alimentos al alza, ropa y prendas de moda a la baja. Es la percepción que tienen los consumidores de países europeos respecto a los precios desde el inicio de la crisis sanitaria. Y en España, esta percepción aún es mayor que en el resto de países.
Cerrar los grifos no basta para ahorrar agua. Hay muchos detalles cotidianos que tienen que ver con la cantidad de consumo hídrico que llevamos a cabo y de los que no siempre somos conscientes. Uno de ellos, y no menor, es la alimentación de nuestro día a día.
El 56% de los consumidores declara consumir productos listos para comer por falta de tiempo, según el estudio “Alimentación de Conveniencia – Ready to eat” publicado por el departamento ShopperView de Aecoc con el objetivo de conocer al consumidor de alimentación de conveniencia y detectar qué productos consume y qué motiva su compra.
Los pescados frescos son los más consumidos en el hogar, representando el 44,6 por ciento del total, seguidos de los mariscos y de las conservas de pescado.
Usted, como consumidor, tiene más poder del que se imagina. Puede parecerle que sus hábitos a la hora de comprar un cartón de leche, cuyo precio no llega a un euro, pasan desapercibidos en el mundo de la distribución.
Alimentos al alza, ropa y prendas de moda a la baja. Es la percepción que tienen los consumidores de países europeos respecto a los precios desde el inicio de la crisis sanitaria. Y en España, esta percepción aún es mayor que en el resto de países.