Nada de sembrar vientos para recoger tempestades. Si lo que se quiere es recoger los gases de efecto invernadero, una ayuda puede ser sembrar el mar con hierro para fertilizar las algas. El ensayo del barco Polarstern, en el que participan investigadores españoles, parece que ha dado sus frutos, según pubica Nature.
La falta de agua dulce es, probablemente, el mayor problema al que se enfrenta el planeta y estas patatas que se riegan con agua salada podrían ser la solución.
Nada de sembrar vientos para recoger tempestades. Si lo que se quiere es recoger los gases de efecto invernadero, una ayuda puede ser sembrar el mar con hierro para fertilizar las algas. El ensayo del barco Polarstern, en el que participan investigadores españoles, parece que ha dado sus frutos, según pubica Nature.