La inversión público-privada en placas fotovoltaicas supondrá unos 12 millones de euros, y una potencia instalada de 18 MWp con 360.000 m2 de superficie. El proyecto supondrá un ahorro de unas 6.000 toneladas de CO2 a la atmósfera anuales
La descentralización del sistema energético a través del autoconsumo y las comunidades energéticas será clave en la transición energética, implicando al consumidor para adquiera un papel activo como gestionar la producción, el intercambio y el almacenamiento de energía renovable, o producir la energía donde se consume. Los modelos de generación distribuida, renovable y colectiva cobran especial relevancia en el medio rural. Generar energía que compartir con los vecinos de forma local, limpia, segura y barata puede ser una palanca de desarrollo para la actividad rural, así como polo de atracción de turismo sostenible y de la actividad económica derivada.
Carlos Pesqué es ingeniero en Organización Industrial por la Universidad de Vic, Ingeniero Técnico Industrial por la Universidad de Zaragoza y Máster Europeo en Energías Renovables por la Universidad de Zaragoza. Tras años trabajando en el sector de la consultoría energética, en 2013 entró a formar parte del área de Energía y Personas de la Fundación Ecología y Desarrollo (ECODES). Desde allí, Carlos ha sido responsable del lanzamiento de iniciativas de innovación social relacionadas con el ODS 7 (Energía asequible y no contaminante), como Ni Un Hogar Sin Energía o Barrio Solar. Actualmente, es responsable de iniciativas en el ámbito de la democratización de la energía y las comunidades energéticas.
Cajamar, una de las empresas de referencia en la gestión de cambio climático por sus medidas e iniciativas dirigidas a reducir la huella de carbono y minorar el cambio climático, según certifica la organización internacional Carbón Disclosure Project (CDP), ha anunciado la instalación de un nuevo proyecto de autoconsumo fotovoltaico, a cargo de la empresa ISE autoconsumo, que estará ubicado en su Estación Experimental ubicada en el paraje de las Palmerillas (El Ejido).
El objetivo es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en estos espacios de uso público y dependientes del Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, contribuyendo de forma directa a la mitigación del cambio climático
Consumo de carne Kilómetro 0. Hacer un “Sobrarbe autóctono y Sostenible”. Son dos de los objetivos del proyecto que nace en el Pirineo Aragonés, gracias a la acción de ASAPI (Asociación Aragonesa de Bovino Raza Pirenaica) junto a la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ), el Ayuntamiento de Aínsa y la Universidad de Zaragoza. Un proyecto que trabajará este 2018 con la intención de crear turismo y consumo sostenible mediante investigación, innovación y nuevas técnicas de manipulado de carne y restauración. Todo ello en el marco del Programa de Desarrollo Rural del Gobierno de Aragón.
La revolución del campo llega a la ciudad. Cada vez son más y más jóvenes los que se deciden a cultivar alimentos en la ciudad. Son pequeños huertos ecológicos escondidos en los rincones urbanos, pequeños espacios dedicados a la agricultura, ya sea con el objetivo del autoconsumo, por la reivindicación de la soberanía alimentaria o una agricultura a pequeña escala que todavía sobrevive en algunos barrios próximos a la zona rural.
La revolución del campo llega a la ciudad. Cada vez son más y más jóvenes los que se deciden a cultivar alimentos en la ciudad. Son pequeños huertos ecológicos escondidos en los rincones urbanos, pequeños espacios dedicados a la agricultura, ya sea con el objetivo del autoconsumo, por la reivindicación de la soberanía alimentaria o una agricultura a pequeña escala que todavía sobrevive en algunos barrios próximos a la zona rural.
La inversión público-privada en placas fotovoltaicas supondrá unos 12 millones de euros, y una potencia instalada de 18 MWp con 360.000 m2 de superficie. El proyecto supondrá un ahorro de unas 6.000 toneladas de CO2 a la atmósfera anuales