AINIA está trabajando en el desarrollo de recubrimientos comestibles para alimentos frescos, con el objetivo de reducir los residuos de envases y evitar el desperdicio alimentario.
El trabajo lo han llevado a cabo investigadores españoles, con la colaboración de otros franceses, y permitirá desarrollar nuevas variedades de este fruto con una vida útil más larga, y así contribuir a reducir el desperdicio de alimentos.
Galilea Export y Save Foods, una empresa de tecnología agroalimentaria especializada en la protección ecológica de los cultivos, han cooperado y están aplicando los tratamientos ecológicos y verdes de Save Foods en los pimientos de Galilea, con el fin de prolongar la vida útil y reducir el deterioro de los productos. El exportador pretende aplicar también el tratamiento en su oferta de aguacates, así como en otras frutas de su oferta para el futuro.
Científicos del Boyce Thompson Institute en Estados Unidos, dirigidos por Jim Giovannoni, han descubierto un gen que podría ayudar a que los tomates se mantengan firmes a la vez que mantienen una combinación óptima de sabor y suavidad cuando se comen. El estudio examinó el genoma del tomate en busca de genes involucrados en el ablandamiento de la fruta, pero no en la maduración de la fruta.
El objetivo del proyecto de investigación Redlosses es desarrollar una herramienta de apoyo a la decisión que prediga la tasa de deterioro de la carne fresca según la composición de la microbiota y parámetros como la temperatura de almacenamiento, envasado en atmósfera modificada, adición de lactato, etc. El proyecto se centra en la elaboración de salchichas frescas.
La doctora María de la Luz Zambrano, en colaboración con la doctora Susana Mendoza Elvira, ambas académicas de la Facultad, desarrolló un envase nanoactivo con aceite de romero que alarga la vida útil de la carne de cerdo al vacío y la protege de la contaminación bacteriana, un trabajo que además de promover este alimento como un ingrediente seguro y favorable para la población surge de un principio ecológico.
El plasma, una tecnología tradicionalmente usada para el sector automotriz y la producción de televisores, ahora también se usa en la frutas y verduras con el n de que duren más tiempo en góndola. El desarrollo es obra de cientícos mexicanos y lo informó este martes el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Cinco alumnos de Ingeniería de la Universidad Católica (UC), crearon una solución tecnológica que permite duplicar la vida útil de las frutas y verduras que estén refrigeradas.
Un producto destinado a la poscosecha de productos frescos a base de extractos vegetales se ha puesto a disposición de USDA-productores de productos frescos ecológicos y convencionales y minoristas. Este producto duplica la vida de los alimentos frescos sin necesidad de refrigeración.
La empresa Saeco y la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) han desarrollado una caja de cartón con propiedades antimicrobianas que permite alargar la vida útil de la frutas y hortalizas frescas en más de un 30 por ciento. Se trata de una caja fabricada con un tipo de "cartón activo" que ha sido desarrollado por la empresa en colaboración con investigadores de la Politécnica y patentado a nivel nacional e internacional.
La Fundación del Jamón Serrano Español ha culminado un estudio de la vida útil del jamón serrano en diferentes formatos de comercialización, con vistas tanto al mercado nacional como a la exportación, que demandan innovación constante en el tipo de alimentos y nuevas presentaciones que mantengan durante periodos prolongados su calidad y estabilidad microbiológica.
Investigadores del Departamento de Química Física y Analítica de la Universidad de Jaén (UJA) han demostrado que la vida útil del aceite de oliva mejora con el aporte de extractos de microalgas marinas ricas en carotenoides, unas moléculas con capacidad antioxidante.
AINIA está trabajando en el desarrollo de recubrimientos comestibles para alimentos frescos, con el objetivo de reducir los residuos de envases y evitar el desperdicio alimentario.